Comienzan a aflorar los sentimientos, sentimientos que muchas veces son confusos, sé que echaré de menos de una manera general a todo lo que antes me rodeaba, en especial a mis amigos y mi familia. Digo general porque no tengo una jerarquía de afecto donde colocar a cada uno de ellos, ambos (familia y amigos) son mis dos pilares, mis dos piernas, con las que tanto he andado estos últimos años.
Pero bueno, es demasiado pronto para la melancolía...
He heredado una vieja maleta negra, con más espacio del que puedo ocupar. Está repleta de abrigos, pantalones, camisas, ropa interior y calcetines. Bueno, al decir repleta me refiero a un poco de cada cosa, ya que con los 23 kg de límite máximo que establece Iberia, poca cosa cabe.
Ya solo queda algo más de un día...
No hay comentarios:
Publicar un comentario